La producción de muchos lubricantes sintéticos comienza con aceites básicos que son sintetizados a partir de hidrocarburos intermedios de alto volumen. Por ejemplo, las polialfaolefinas (PAO) se sintetizan a partir del etileno. Sin embargo, otros sintéticos se formulan con materia prima muy básica. Por ejemplo, los fluidos a base de silicona están hechos de arena (SiO2), requieren de considerable energía, y hay muchos pasos en su fabricación, incluyendo el manejo de materiales muy corrosivos.
Estas etapas variables de fabricación explican el amplio rango de precios de los productos sintéticos y el precio mucho más elevado de los “sintéticos exóticos” como las fluorosiliconas. A diferencia de los básicos minerales, que son una mezcla compleja de hidrocarburos naturales refinados del petróleo crudo, los básicos sintéticos son hechos por el hombre, y tienen estructura molecular controlada, con propiedades predecibles. Como sucede con todos los fluidos lubricantes actuales, los sintéticos se formulan combinando los básicos con ciertos aditivos seleccionados.